miércoles, 19 de mayo de 2010

Beirut, año 0

Me encanta descubrir nuevas literaturas y una de las que más me atraen, junto con la japonesa, es la árabe. Pero más que las novelas centradas en "Las Mil y una Noches" me gustan aquellas que muestran la realidad actual, que son una crítica a muchos aspectos cerrados y conservadores de la sociedad y, si estas críticas son realizadas por mujeres mucho mejor.

El otro día cuando fuí a la Librería me llamó muchísimo la atención el título de este libro, "El día que Nina Simone dejó de cantar". Título muy poético, bello y lleno de simbolismo. Significado que he entendido mejor tras leerlo. 


Es un libro escrito por Darina al- Joundi y Mohamed Kacimi, ambos son libaneses. En realidad, el libro nos narra la historia de Darina, ella es la auténtica protagonista de la misma junto a Libano y Beirut. Una historia, su vida, muy especial marcada por una coyuntura también particular: la Guerra Civil libanesa.

Darina al- Joundi nació en Beirut en 1968. Su padre,  Assim, era un refugiado sirio en Libano. No miento si digo que su padre fue la persona que más la marcó. Podríamos pensar que, el hecho de vivir en un país musulmán como El Libano y bajo una coyuntura tan negativa, todo alrrededor de Darina era represión empezando por su familia pero no fue así. Su padre era un intelectual, un hombre que desde siempre inculcó el amor por la libertad tanto a Darina como a sus otras 2 hermanas. Pese a ser musulmán, Assim es un hombre laico que no quiere saber nada de dioses y religiones ( y menos de la musulmana) tan sólo se siente atraído por los ritos católicos pero creo que era porque los veía un poco exóticos. Una gran prueba de este espíritu laico y libre que tenía era la idea que él tenía de su propio funeral y que Darina va a intentar que se cumpla: Assim no quiere rezos ni plegarias que le acompañen a la tumba, sólo quiere música de Jazz y si es de Nina Simone tanto mejor. Tampoco quiere ser enterrado mirando a La Meca. Darina va a intentar que la última voluntad de su padre se cumpla pero los hombres que acompañan a su madre no sólo se lo impiden sino que esta cabezonería que ella tiene por cumplir con la última voluntad de su padre va a traerle consecuencias.


Desde pequeña, su padre marca su vida. Pese a ser musulmanes, ella y sus hermanas van a un Colegio de Monjas. Su familia pertenece a la élite de Beirut. Su padre tiene fuertes contactos con la OLP y con Carlos, el famoso terrorista. Como exiliado sirio siente miedo cuando Siria decide participar en la Guerra que enfrentará a falangistas ( cristianos linaneses) con musulmanes ( palestinos principalmente). La Historia de El Líbano forma parte de la propia historia de Darina y de su familia. A través de sus ojos, de sus palabras, vamos conociendo cómo fue esta guerra de primera mano y como las clases altas lograban esquivar un poco tanta violencia. Una violencia que a la propia Darina parece excitarle y encantarle pues llega a echarla de menos.


Este carácter tan peculiar es lo que más me ha gustado de la protagonista. Todos sabemos que, aunque un país musulmán sea más progresista que otro, las mujeres siguen estando consideradas como ciudadanos de segunda fila. Darina y sus hermanas tienen mucha libertad en casa pero ésta choca con la sociedad que las rodea. Sus dos hermanas lo soportan más porque son más dóciles, ella es más rebelde y no está dispuesta a aceptar táles condiciones por muchas consecuencias negativas que tengan. Me gusta esta forma que ella tiene de luchar por sus ideas, la veo una mujer muy segura de sí misma y fiel a sus ideas, fiel a las enseñanzas que le dió su padre que nada tenía que ver con el prototipo de hombre musulmán ( y menos radical).


Me está resultando un poco difícil resumir el argumento del libro porque es muy denso ( en el sentido de interesante no de aburrido) y aporta muchas cosas. Son 159 páginas vibrantes de principio a fin. En realidad, todo el libro es una larga carta que Darina le entrega a Mohamed Kacimi en París, cuando le conoce por primera vez en 2006. Él se siente fascinado y conmovido por lo que lee y es de agradecerle que decidiese publicarlo. Estoy segura de que este libro no habrá corrido la misma suerte en todos los países musulmanes, no creo que ni en El Líbano puesto que Darina tuvo que salir de allí corriendo pero, si lo ha hecho, si ha sido editado me parece extraordinario.


Es una lectura no sólo interesante sino altamente recomendable. A mí me ha encantado. Desde el punto de vista puramente histórico me ha fascinado conocer un poco mejor la Historia reciente de El Líbano y cómo fue la situación durante la Guerra Civil y cómo soportaron los ataques israelís. Desde el punto de vista meramente lector, me ha parecido que está muy bien escrito. El estilo es directo, Darina no es una escritora que se ande por las ramas, todo lo expone de forma clara y directa. Ella fue actriz de televisión en su país, una actriz bastante importante, me imagino que cada uno de sus papeles aportaría un rayo más a sus ansias de libertad.


Por todo ello no puedo más que recomendar la lectura de este libro. En la Biblioteca de El Perelló ya está disponible con el siguiente tejuelo: N/JOU/dia. Es un libro con el que he disfrutado y que me ha enseñado muchas cosas, la principal a no renunciar a lo que uno cree, cueste lo que cueste.


Igual suena ñoño pero esta opinión se la quiero dedicar a mi amigo Walid. Él vivía en Tenerife pero nació en Beirut. Walid y yo nos escribimos largas cartas durante casi 20 años. Él me contaba muchas cosas de El Líbano y cómo tuvieron que salir de allí al empezar la guerra. El recuerdo de Walid me ha acercado más a Darina y su historia me lo ha hecho recordar aún más. Él siempre fue uno de mis mejores amigos aunque nunca nos viésemos y sólo nos conociésemos por carta. "El día que Nina Simone dejó de cantar" es también un pequeño homenaje a él.







1 comentario:

Cristina dijo...

Pues ahora que lo pienso creo que no he leído nada de literatura árabe. El libro que comentas me ha llamado la atención, así que tomo nota para leerlo.

Besos.